El Frente de Todos tiene una sólida ventaja de nueve puntos en la Provincia de Buenos Aires, con una proyección de voto superior al 43 por ciento frente al 34 por ciento de la sumatoria de los candidatos de Juntos. La solidez deviene de que nada menos que el 39 por ciento de los encuestados se considera oficialista, con gran proporción de los que se auto-definen como peronistas o kirchneristas. En CABA, Juntos parte de un porcentaje que viene alcanzando en las últimas elecciones, 50 por ciento, aunque el Frente de Todos haría una buena elección a partir de la renovación de sus candidatos, Leandro Santoro y Gisela Marziotta, ambos con buena imagen. El FdT conseguiría cerca del 30 por ciento, una performance mucho mejor que el 21 por ciento de 2017 y el apenas 16 por ciento de 2013, las últimas dos elecciones de medio término. Ambas encuestas se realizaron antes de que se conociera el cumpleaños en la Quinta Presidencial de Olivos, celebrado durante el aislamiento obligatorio. No está claro si ese hecho tendrá un impacto electoral, dado que en las razones de voto influyen una multiplicidad de factores: la economía, la vacunación, la salida de la pandemia. Habrá que ver cómo impacta en los que están menos alineados con las dos grandes fuerzas, es decir el electorado más independiente y moderado. Por supuesto que la oposición lo utilizará como argumento de campaña, pero es dudoso que tenga efecto.
Las conclusiones surgen de dos encuestas y el análisis realizados por el Centro de Estudios de Opinión Pública (CEOP), que lidera Roberto Bacman. En Provincia de Buenos Aires se entrevistaron 1059 personas y en CABA 1119, respetándose las proporciones por edad, sexo y nivel socioeconómico. El sistema fue on-line, que significa que se toma la totalidad de los usuarios de Facebook e Instagram, se geocodifican, se envían las preguntas, y se cumple con las cuotas por zonas, edades, sexo y nivel económico.